Juan Bernier introdujo en la punta del escudo, el símbolo heráldico de la Casa de Hernán Armijo de Souza, capitán de Fernando III, que venció a los moros en la batalla de la Vega, hacia 1235, y en cuyo recuerdo se le denominó al lugar "La Vega de Armijo", al poco tiempo de la conquista del castillo de Qauria-al-Wad (Villa del Río), mediante un triángulo curvilíneo "entado en punta", con el vértice superior "caído" es decir situado en el tercio inferior del escudo. Las armas de ese noble linaje son un escudo portugués en campo de oro (amarillo) con tres barras de gules (rojo-bermellón).
Según Alfonso Porras de la Puente, el señorío de Villa del Río, procede del mismo linaje pero de distinta varonía, es decir de la que don Vasco Alfonso de Sousa, familiar de la reina doña María de Portugal, esposa de Alfonso XI de Castilla, las armas de la varonía de éste linaje son escudo cuartelado en sotuer o forma de aspa. En el primer y cuarto cuartel, se sitúa en campo de gules, un castillo de oro donjonado, mazonado de sable y adjurado de azur, que son las armas reales de la corona de Castilla. En el segundo y tercer cuartel, en campo de plata, las cinco quinas de Portugal, o escudo de azur, puestos en sotuer y cargados cada uno con cinco roelas e plata.
Por ello, en la tramitación para la legalización oficial de Escudo Heráldico de Villa del Río, debe corregirse la varonía del linaje de los Sousa, colocando en el "triángulo curvilíneo entado en punta y caído", las armas últimamente referidas de Castilla y Portugal, de D. Antonio Alfonso de Sousa y Guzmán, I Señor de la Villa de Aldea del Río, proviene como antes he referido de la varonía de don Vasco Alfonso de Sousa, Alcaide y Justicia Mayor de Córdoba, Señor de Castil-Azur (Puente Genil) en el año 1366.

José Luis Lope y López de Rego

Revista de feria 2003